Ideas en movimiento: La provocación
Las ideas nuevas a veces nos hacen abrir más grandes los ojos, nos provocan un pequeño grito de asombro, o nos dan ganas de levantarnos e ir a contárselas a todos los que las quieran escuchar. Las ideas nos ponen en movimiento. Nos mueven el cerebro, el cuerpo y el alma.
Después de un año de quietud forzada, aprendimos de lo bueno de la calma y también que extrañamos profundamente estar con otros, cambiar de espacios, la experiencia de compartir más allá de lo virtual. También empezamos a sentir que queríamos hacer algo más con esas ideas que nos transforman.
Y para empezar ese camino le pedimos a 8 personas que queremos y admiramos mucho que nos provoquen con ideas para poner al mundo en movimiento.
En la primera charla de este universo escuchemos cómo las plantas de un jardín nos pueden provocar a pensar sobre cómo florecen las ideas.
Gala Díaz Langou
“Las crisis nos vuelven mejores para trabajar en comunidad y hacer frente a los riesgos que percibimos.”
Las ideas y las plantas de mi jardín
En su provocación, Rebeca Hwang nos cuenta cómo la jardinería impactó en su manera de ver y pensar las ideas durante la pandemia.
Melina Furman
“Antes de la pandemia la educación era eso que pasaba fuera de casa, pero la pandemia hizo que eso cambie de repente.”
Poner al mundo nuevamente en movimiento va a significar un esfuerzo muy grande de parte de todos. Y creemos que si vamos a dedicar ese esfuerzo tiene mucho sentido pensar cómo podemos construir un mundo en movimiento mejor del que teníamos antes de la pandemia. En las charlas que vas a ver a continuación vas a encontrar ideas sobre la como hacer eso con la educación, la cultura de los vínculos, la crisis climática y ecológica y la forma en que innovamos.
Revivir al intermediario
En su provocación, Mariano Sigman nos comparte algunas preguntas sobre el rol del intermediario y su impacto en cualquier forma de mediación.
En 2021 vamos a buscar a esas personas increíbles que encontraron, descubrieron o desarrollaron ideas que pueden transformar nuestro mundo, mejorar nuestras vidas en las cosas pequeñas de todos los días o en las que tienen gran impacto en nuestro futuro.
Con ideas que vienen de la ciencia, el arte, la tecnología, la salud, las humanidades, el diseño, o de cualquier disciplina del conocimiento. Y vamos a tratar junto a nuestra comunidad, de pensar, actuar y colaborar para que esas ideas se pongan en movimiento.
Qué sucederá, no lo sabemos. No tenemos un preciso plan de vuelo. Pero estamos tranquilos porque escuchamos la provocación de Carlos Perez que podés encontrar a continuación.
El plan de no tener plan
En su provocación, Carlos Perez nos invita a reflexionar acerca de la forma en que planificamos y a pensar en otras maneras de conversar amablemente con la realidad más allá del plan para poder generar nuevas experiencias.